El domingo, 28 de julio de 1946, el diario ABC dedica a Sigüenza, Guadalajara, y Gajanejos su portada. Transcribimos a continuación las principales menciones a nuestro pueblo en esta edición.
"CONTINUAREMOS TRANQUILOS LEVANTANDO TEMPLOS A DIOS Y FÁBRICAS PARA EL TRABAJO" DIJO AYER EL JEFE DEL ESTADO EN SIGÜENZA.
El caudillo presidió la solemne entrega de la Catedral, restaurada, al obispo de la diócesis. Asistieron a la ceremonia los ministros de Asuntos Exteriores, Gobernación, Justicia y Educación Nacional. Una SAlve en la iglesia del nuevo pueblo de Gajanejos. Vibrantes palabras del Generalísimo en Guadalajara. El firme propósito de llevar la revolución nacional española a todos los ámbitos.
(...) Al aparecer el Caudillo en la fachada principal del edificio (por la Catedral de Sigüenza) fue acogido con una atronadora salva de aplausos, que le acompañó incesantemente hasta el momento de ocupar el automóvil, en unión siempre del ministro de la Gobernación y del gobernador civil de la provincia, con los cuales se traslado al nuevo pueblo de Gajanejos. Todavía duraron las manifestaciones de entusiasmo hasta que el coche del Jefe del Estado se perdió de vista.
En todos los pueblos del trayecto, hasta llegar al lugar antes mencionado, fue objeto asimismo de cariñosas manifestaciones de adhesión y simpatía.
El nuevo pueblo de Gajanejos hallábase profusamente adornado con banderas y en todos los balcones había colgaduras.
El Generalísimo Franco fue recibido por las autoridades locales y el director general de Regiones Devastadas, señor Moreno Torres. En la puerta de la iglesia le aguardaban el obispo de la Diócesis, doctor Muñoyerro, en unión de quien penetró en el templo bajo palio y a los acordes del Himno Nacional. En el arco del presbiterio se lee esta inscripción: Per Virginem Matrem concedat nobis dominus salutem et pacem (Que el Señor nos conceda la salud y la paz por mediación de la Virgen y su Madre).
El pueblo no cesó de aplaudirle un sólo instante desde su aparición en la localidad hasta que ya dentro del templo, el doctor Muñoyerro, revestido de pontifical, pronunció las siguientes palabras: "Celebramos en este acto la inauguración simbólica de esta iglesia parroquial. Digo simbólica, porque ya está por necesidad dedicada al culto. Sin embargo, yo quiero aprovechar esta ocasión para repetiros la expresión de gratitud que esta mañana os dedicaba en la magnífica Iglesia Catedral de Sigüenza. Os hemos expresado nuestra gratitud ante el altar de aquella espléndida capilla catedralicia; ahora lo hacemos igualmente en esta humilde parroquia del pueblo de Gajanejos, excelentísimo señor; y tanto en este humilde pueblo como en las bóvedas de aquella espléndida Catedral, se darán gracias a Dios por los beneficios que, tanto a Sigüenza como a Gajanejos y a toda la Diócesis, habéis prestado".
Tened la seguridad de que aquí el pueblo es rico en fe. Yo aseguro, aque aquí, al igual que en la magnífica Catedral de Sigüenza, se darán gracias a Dios con el mismo fervor y se darán gracias con el mismo entusiasmo, de corazón a Vuestra Excelencia, y pediremos a Dios defienda a España, la proteja, y la encauce por los caminos de la oración y de la fe, y al mismo tiempo pedimos a nuestra patrona Santa Librada, conceda su patrocinio a Vuestra Excelencia y sobre toda España. Invoco también la protección de la Santísima Virgen, y como muestra de veneración vamos a entonar la Salve.
Inmediatamente después se cantó una Salve solemnísima, terminada la cual, el Caudillo, bajo palio, con el obispo de la Diócesis, acompañado de los ministros y autoridades, y seguido del vecindario, se dirigió al Ayuntamiento, cruzando la plaza entre delirantes aclamaciones. Un grupo de muchachos portaba un inmenso cartelón en el que se leía: "Brihuega saluda al Caudillo".
En el salón de actos del Ayuntamiento, el Jefe del Estado y sus acompañantes, presenciaron cómo el obispo de la Diócesis bendecía el pueblo. Tales y tan incesantes eran las aclamaciones que el Generalísimo tuvo que asomarse al balcón desde donde escuchó una (...). Inmediatamente después abandonó el Ayuntamiento, y siempre acompañado por el pueblo, ocupó el automóvil. Fue despedido fervorosa y entusiásticamente por todo el vecindario en masa, que rodeó durante largo rato el vehículo. El nuevo pueblo de Gajanejos está edificado en plena meseta, para lo cual se ha prescindido de la yerma perspectiva que ofrecían las ruinas del antiguo. Las viviendas constituyen una serie de casas acogedoras, que permitirán una vida agradable. La urbanización se ha proyectado a base de una vía de penetración que con el castizo nombre de calle Mayor, es la principal del pueblo y sirve de nexo entre la carretera de Madrid a Zaragoza y el núcleo central de la vida del nuevo pueblo. Dicho núcleo agrupa los edificios de la iglesia, casa rectoral, dependencias parroquiales, Ayuntamiento, viviendas de fucionarios, de particulares, y establecimientos comerciales (...).
CARACTERÍSTICAS DEL PUEBLO DE GAJANEJOS
Gajanejos es un pueblo de antiguo origen que, con el título de villa, Ayuntamiento y una población de 370 habitantes, pertenece al partido judicial de Brihuega y a la diócesis de Sigüenza.
La villa, pequeña, a pesar d elos grandes espacios destinados a corrales que en sus casas existen, se halla situada al extremo de una vasta llanura, asomándose a unos barrancos que más merecen este nombre que el de cuesta, por cuyo fondo fluyen tranquilas las aguas del rio Vadier. Es centro de un término municipal que limita con los de Brihuega, Utande, Ledanca y Valfermoso de las Monjas. Cuenta con mas de 3.000 fanegas d emonte poblado, de encinas, robles y vegetación de monte bajo. El total de viviendas que se entrega se eleva a noventa, algunas de dos plantas, y además cuenta con el Ayuntamiento, escuelas, ermita, iglesia, casa rectoral, depósito de agua y abastecimientos, fuentes, red de alumbrado y un hermoso arbolado.
El nuevo pueblo de Gajanejos está edificado en plena meseta para lo cual se ha prescindido de la yerma perspectiva que ofrecían las ruinas del antiguo. Las viviendas constituyen una serie de casas acogedoras que permitirán la vida agradable. La urbanización se ha proyectado a base de una vía de penetración que con el castizo nombre de calle Mayor, es la principal del pueblo y sirve de nexo entre la carretera de Madrid a Zaragoza y el núcleo central de la vida del nuevo pueblo. Dicho núcleo agrupa los edificios de la iglesia, casa rectoral, dependencias parroquiales, Ayuntamiento, viviendas de fucionarios, de particulares, y establecimientos comerciales.
Gracias a Marta Barbancho por hacernos llegar esta noticia.
